Buenos días, esta noticia es positiva para muchas personas, enhorabuena:
México es un país con 120 millones de habitantes. La población ha ido creciendo a pasos agigantados y el resultado son 53 millones de pobres, 11 de ellos en precariedad máxima, y un agujero de nueve millones de viviendas. Los intentos del estado por arreglar estas carencias han sido en vano ya que el coste inmobiliario y el beneficio de los constructores han reducido el impacto en las ayudas oficiales convirtiendo el derecho a una vivienda digna en un bien casi inalcanzable en algunas zonas.
La arquitecta mexicana, Tatiana Bilbao ha creado un prototipo basando en la necesidad de millones de personas. Un espacio de 63,35 metros cuadrados; dos habitaciones, un baño, una cocina y un salón-comedor. Ese es el espacio que ocupa la denominada Vivienda popular, uno de los proyectos estrella presentados en la Bienal de Arquitectura de Chicago.
Su precio es de 6000€, puede construirse en menos de un mes y, al igual que un mueble de Ikea, permite que la levanten sus propios moradores. Es extremadamente funcional y sostenible. “La arquitectura se ha alejado de la sociedad y tiene que volver a ser relevante, ejercitar su poder de dar o quitar calidad de vida. El beneficio social debe primar sobre el económico”, explica la autora.
Tatiana Bilbao partió de la idea de dar calidad de vida a los moradores pero sin aumentar coste ni simplicidad. En la Bienal de Chicago se ha construido la casa en tres semanas delante de los organizadores.
El espacio supera el mínimo autorizado en México (43 metros) mejorando la habitabilidad y la sensación de estar en el hogar.
Los colores llamativos de sus paredes, el tipo de construcción o los espacios abiertos dan como resultado una construcción ligera, cómoda y con una calidad superior a las viviendas habituales. Todos merecemos un hogar digno y de esta manera estamos construyendo derechos para todos.
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